El Barcelona y el Athletic Club jugarán el sábado su último duelo en San Mamés, donde los azulgrana podrían ponerse a tiro de cantar el alirón, aunque para ello deberán superar a un rival que vive angustiado por su situación deportiva y que no va a permitir ninguna fiesta.
También, aunque el Barcelona gane su partido, la consecución de la Liga estará a expensas del derbi entre Atlético y Real Madrid, que comenzará dos horas más tarde, pues si el equipo de Jose Mourinho no pierde, el conjunto azulgrana deberá esperar otra semana para alzarse con el título.
El fin de semana apunta otro panorama más ilusionante para el Barcelona, que no el que se dibujó la noche del martes, cuando fueron arrollados en la ida de las semifinales en el campo del Bayern de Múnich. Una noche aciaga con goleada incluida (4-0) que dejó muy tocados a los barcelonistas, que en San Mamés tendrán la ocasión de recuperar el ánimo, ya que tienen un título a la vista.
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